DF Lab / Región del Biobío: hub de emprendimiento 4.0

Albergada por laderas cordilleranas, una extensa costa y características geográficas en las que converge tanto la tradición como la modernidad, la región del Biobío se ha posicionado como un atractivo destino turístico, pero también como un territorio favorable para el desarrollo de un ecosistema emprendedor cuyas posibilidades de expansión, incluso más allá de las fronteras, han transitado desde proyectos ambiciosos hacia anhelos razonables y cada vez más tangibles.

En la última década, la región ha sido percibida como un centro cada vez más pujante en términos de emprendimiento. Algo que se puede explicar, por ejemplo, por un sector industrial en el que negocios del ámbito siderúrgico, forestal, pesquero, metalmecánico, entre otros, han impulsado procesos productivos que requieren la participación de una gran cantidad de personas y que han avanzado considerablemente, generando las condiciones propicias para elaborar soluciones innovadoras en respuesta a sus propios desafíos y la necesidad de ser más eficientes.

En algunos casos, estos productos o nuevas tecnologías provienen del ingenio de quienes en algún momento de su trayectoria profesional fueron capaces de detectar una oportunidad y generar su propio negocio, surgiendo como proveedores y logrando competir en las principales ligas del mercado. En otros, la sólida presencia de instituciones de educación superior y centros de investigación han permitido abordar los distintos retos e irrumpir con hallazgos de alto impacto.

En cualquier caso, estos aspectos nos alientan a pensar que la región del Biobío posee los elementos necesarios para consolidarse como un centro revolucionario y un hub de emprendimiento 4.0. Más aun considerando que el Producto Interno Bruto Regional (PIBR) aumentó un 24,9% desde 2013, alcanzando los 12.489 mil millones de pesos en 2021. Es decir, un 6,4% del PIB nacional.

Esto sumado a cifras como las que posicionaron a la zona como aquella con el mayor crecimiento del país en el segundo trimestre de 2023, con un 6% más que el mismo periodo del año anterior, dan cuenta del dinamismo que ha experimentado este territorio y de una fortaleza económica que ha contribuido positivamente con el éxito de los emprendedores de alto impacto, quienes han encontrado en este una gran oportunidad para consolidar sus negocios.

No obstante, el robustecimiento de este ecosistema demanda que aspectos como la colaboración, comunicación y articulación sean alentados tanto por quienes están iniciando este camino como por quienes ya lo transitaron, de manera que se pueda apoyar conjuntamente la construcción de una estructura aún más sólida que potencie el crecimiento de este sector en base a experiencias, conocimientos y aprendizajes compartidos, tal como busca la iniciativa Startup Biobío.

También es esencial que más emprendedores reinviertan en sus comunidades, que los grandes patrimonios no se limiten a inversiones tradicionales, que existan incentivos tributarios y fiscales para impulsar la inversión y el desarrollo de nuevos emprendimientos de alto impacto, que se promuevan instrumentos de inversión diseñados para ayudar al emprendedor sin limitar las inversiones futuras, y que se comprendan las necesidades de este sector.

Solo así podremos lograr que la región del Biobío sea reconocida como el ecosistema de emprendimiento e innovación regional más grande de Chile y uno de los principales en Latinoamérica.